Retos

Ya han pasado 20 días de Julio y estoy a un paso de terminar el Camp NaNo de 2020. Desde principios de mes la cosa ha estado algo complicada en tema salud. Nada grave: vértigos y migrañas. Pero aún o me he podido deshacer de ellos así que voy a medio fuelle.

Además tengo al peque 24/7 pegado a mí así que para escribir tengo que sacar ratitos de cuando duerme o está concentrado en alguna otra cosa. Escribir con muchas interrupciones se me da fatal. Necesito concentrarme.

A medio Camp NaNo

He conseguido perfilar bastante la idea del #ProyectoWhatIf. Es verdad que tengo unos cuantos hilos colgando que tengo que ver cómo encajo pero a grandes rasgos la idea ya está.

Es la primera vez en mi vida que tengo tan descrita la idea antes de ponerme a escribir la historia en sí. Normalmente me pueden las ganas y empiezo a escribir las escenas que tengo en la cabeza. A veces no encajan con lo que escribo al final, pero me sirve para coger ritmo.

En este caso he escrito incluso cosas que influyen en los personajes pero no “salen” en la historia. Nunca me había preparado con tanto mimo, la verdad. No sé qué significa eso. Quizás estoy evolucionando en mi forma de escribir o tal vez este proyecto es lo que pide.

¿Como van las estadísticas?

Si quieres verlo más completo y más “al día” te recomiendo que te pases por mi perfil de la web del Camp NaNo.

Empecé con muchas ganas, luego tuve los problemillas de salud… remonté en unos días que me encontré mejor y luego muchos altibajos. Y es que a lo mejor me levanto genial y el peque duerme hasta las 9 o las 10 y claro me cunde mucho. Pero también puede despertarse a las 7 y algo y no darme tregua en todo el día.

En el progreso general se ve que he conseguido ir un poquito por encima de lo que debería. Eso me deja más tranquila porque tengo algo de colchón para renquear. El día de hoy va para abajo porque no he metido datos, me he venido al blog a contaros qué tal.

¿Algo que contar sobre el proyecto?

Debo decir que, como siempre, los personajes se me han ido un poco de madre. Tenía la idea principal bastante asentada y se ha quedado tal cual pensé en su origen, pero los personajes han evolucionado.

No tenía pensado meter sexo en la historia. No estoy segura de si se escribirlo. Disfruto mucho leyendo romántica y erótica pero no me he puesto a escribir ese tipo de cosas en mi vida. He hecho algunos pinitos, pero nada serio.

La cosa es que estos personajes en principio eran algo más jóvenes y les he puesto un par de años más para que todos tengan por encima de los 18 de forma que me sienta cómoda si al final cae alguna escena.

Que no es como si la gente de 16 no tuviera sexo pero prefiero mantenerlos a todos legales. Por si acaso.

Me hice gracia a mi misma porque me di cuenta de que mis búsquedas poco a poco me iban llevando por ese camino pero hasta no verlo en Google no me dio en la cara. Aunque si ves la imagen te das cuenta que pasar de “vino típico de 1800″ a “ropa interior femenina en 1800″ y finalmente “la sexualidad en el siglo xix” pues… es obvio.

He podido esbozar lo que sería el primer capítulo. No estoy contenta en realidad con como ha quedado y es más que probable que lo reescriba o lo cambie, pero la idea del Camp NaNo es justo la de avanzar sin revisar y es eso lo que voy a hacer. Tirar hacia adelante sin mirar atrás. Ya llegará el momento de la corrección.

En 10 días último repaso y veremos qué tal.