Este fragmento que he llamado “Cambios” forma parte de lo que llamé “Proyecto cueva” y se convirtió finalmente en la novela “Elijo el arcoíris”.
Está incluído en la versión final del libro de forma que puedes hacerte una idea de lo que encontrarás entre sus páginas.
Espero que lo disfrutes.
Fragmento: Cambios
Saboreo mi café que se ha quedado ya frío. Desde que llegaste es raro el día que llego a bebérmelo caliente. A veces lo preparo, olvido haberlo hecho y me lo encuentro por la cocina. En otras ocasiones voy a dar el primer sorbo cuando justo oigo que te despiertas. Estoy empezando a aficionarme a este nuevo sabor.
Desde que estás aquí han cambiado tantas cosas… ha cambiado mi vida y he cambiado yo. No es que todo sea absolutamente diferente. Se trata de cambios a menudo imperceptibles, a los que ya nos hemos acostumbrado y sin lo que ya se nos haría raro vivir.
Pero si pienso en cambios, debo ser sincera y quien más ha cambiado eres tú.
Cada día me sorprendes con algo nuevo. Y yo no dejo de sorprenderme a estas alturas ya debería esperar novedades cada cierto tiempo. Pero no me las espero.
Cada día, cuando abres los ojos y te despiertas es una nueva oportunidad. Para hacer cosas nuevas, o las de siempre. Aprender algo nuevo, o repetir las cosas de ayer. Para investigar, averiguar cosas nuevas, unir ideas. Sacar conclusiones.
Te miro y veo la potencialidad de la vida. Todo lo que está dentro de cada ser vivo esperando a ser destapado. Con algo de libertad y unos pocos cuidados cualquier ser vivo es capaz de grandes cosas.
Sentada en el suelo, con mi taza de café frío te observo. A veces se me escapa una media sonrisa, es inevitable, eres tan mono.
Pero últimamente te observo más bien en silencio. Con seriedad, tristeza… o neutralidad. No me maravillo de la misma manera que hace un tiempo.
No es que me haya cansado de ti, ni de que me haba aburrido o esté cansada. En absoluto.
Hay algo que me impide levantarme a jugar contigo. La verdad es que estoy cansada… ya son muchas noches contigo. Muchas noches con despertares y teta entre medias.
No me quejo. No lo cambiaría por nada del mundo mi amor. La gente de fuera ve una clara relación entre las malas noches y mi cansancio. Yo no lo veo tan claro. Y disfrutamos tanto que me parece una pena perder algo tan bonito solo por descansar un poco más.
Si fuera cansancio me echaría una siesta o dormiría más, pero no es el caso.
Quizás tenga algo de anemia. Siempre me pasa que me falta algo de hierro. Me temo que te he traspasado los genes que hacen que no tengamos suficiente hierro. Me siento culpable por ello porque no estoy segura de si te he traspasado mis genes o mi forma de alimentarme. Quiero que crezcas fuerte y sano, sin problemas. Pero ahí estás con tu anemia.
Novela: “Elijo el arcoíris”.
Este es un fragmento de la novela Elijo el arcoíris, si te ha causado curiosidad te invito a echarle un vistazo. Puedes leer los primeros capítulos online en Amazon.
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Muchas gracias por darle una oportunidad a la novela, me encantaría conocer tu opinión así que puedes dejarmela en comentarios por aquí, en Amazon o en Goodreads.
